Paradojas

¿Por qué, si uno de los actos protocolarios más importantes cuando alguna autoridad gubernamental toma posesión de un cargo público es el juramento de cumplir y hacer cumplir la Constitución, hacen tantos esfuerzos por modificarla cuando ya se encuentran en funciones, en lugar de cumplirla?

¿Por qué, si uno de los ejes rectores que han adoptado muchos gobiernos al rededor del mundo, esos que llaman transversales, debido a que las diferentes políticas públicas emanadas de los programas de gobierno tienen que buscar incidir en dichos ejes es el conocido como “Salud reproductiva”, ha de tener como objetivo prioritario la legalización del aborto, llamándolo “Derecho al aborto seguro y gratuito” si éste nada tiene de Salud Reproductiva? Y lo digo porque en un aborto lo único seguro es que muere un ser humano indefenso, en el vientre de su madre, perfectamente identificable además, como hombre o mujer gracias a los avances de la genética, por lo tanto ahí no hay ninguna reproducción, ahí hay antinatalismo descarnado bajo el eufemismo de salud reproductiva.

Y por otro lado, aborto seguro es un término demasiado ambiguo, otro eufemismo, no hay una sola mujer que ordene o permita el asesinato de su propio hijo, A QUIEN SE LE PUEDA GARANTIZAR que está libre de riesgos, que no tendrá ninguna complicación y mucho menos garantizarle que no va a morir o que puede quedar estéril definitivamente, nadie se lo va a poner por escrito, al contrario, tendrá que firmar un documento llamado CONSENTIMIENTO INFORMADO, en el que libera de toda responsabilidad al médico o institución que mate a su hijo, de tal suerte que ni es segura más que la muerte de una, y tal vez de dos personas, una de ellas, por cierto, indefensa.

Asimismo, por qué llamarle gratuito a algo que si bien piden que se pague con dinero público, esto no lo vuelve gratuito como por arte de magia, pues todo tiene precios y costos, desde el más insignificante trozo de gasa estéril, hasta el uso de quirófanos y participación de personal ¿médico? Por lo tanto, ¿No les parece esto otra paradoja? Y además, doblemente paradójico, pues para legislar sobre esta materia es necesario hacer modificaciones a la Constitución que han jurado cumplir y hacer cumplir, y en la que está CONSAGRADO EL DERECHO A LA VIDA DESDE LA CONCEPCIÓN HASTA LA MUERTE, así como lo está en diversos tratados internacionales RATIFICADOS POR NUESTRO PAÍS, lo cual les confiere el mismo nivel jurídico que la propia Constitución.

¿No es esto un mundo de locos o de perversos?

¿No es paradójico que hagan cuantiosas inversiones tanto en factor humano, por todas las personas que trabajan en hacer estos paradójicos planteamientos, por llamarlos de alguna manera, tantos otros a los que hacen trabajar para que se pronuncien como Autoridad a favor o en contra, presionando desde luego, para conseguir el apoyo; recursos económicos sumamente onerosos para cabildeos y propaganda, así como el valioso tiempo de quienes impulsan y quienes nos tenemos que oponer, cuando hay problemas más urgentes que atender en lugar de asesinar a los NO NACIDOS, tales como asegurar el derecho a la salud tanto a los nacidos como a los no nacidos?

¿Será que esto es lo que la sociedad en su conjunto considera como prioritario?

Yo creo que no. ¿Y tú que dices?